jueves, 5 de junio de 2008

El Antahkarana

Antiguo Símbolo de Sanación
Este símbolo sagrado se ha mantenido en secreto por miles de años, conocido y usado por muy pocos. Ahora a llegado el tiempo para que todos tengan acceso a él. El Antahkarana es un símbolo antiguo para sanación y meditación que ha sido utilizado en el Tíbet y la China desde hace miles de años. Es un símbolo muy poderoso, y con solo tenerlo cerca de ti crea un efecto positivo en tus chakras y en tu aura. Cuando se utiliza en las meditaciones, produce automáticamente lo que los Taoístas denominan "la gran órbita microcósmica", lo que significa que la energía que normalmente entra al cuerpo por el chakra de la corona, lo hace por los chakras de los pies, y sube por la parte posterior de la espalda hasta la cabeza, para luego bajar por el frente del cuerpo hasta los pies, creando así un flujo continuo de energía en todos los chakras. También neutraliza la energía que se encuentra acumulada en los objetos, como joyas o cuarzos, con solo colocar el objeto entre dos símbolos.
Este símbolo es multi-dimensional. Desde una perspectiva parece ser de dos dimensiones, pero esta formado de hecho por tres sietes en una superficie plana. Los tres sietes representan los siete chakras, los siete colores y los siete tonos de la escala musical. Los tres sietes son mencionados en el Libro de Revelaciones como las siete velas, las siete trompetas y los siete sellos. Desde otra perspectiva, este símbolo parece ser un cubo de tres dimensiones. Su energía se mueve hacia arriba de dos a tres dimensiones visibles y continúa de esta manera hasta llegar a la mas alta dimensión - la dimensión del Ser Superior.
El uso de este símbolo se remonta en la historia a una antigua técnica de meditación Tibetana. Unos pocos maestros de meditación lo conocían y lo mantenían en secreto para acelerar su crecimiento. La práctica de la meditación tibetana tomaba lugar en una habitación iluminada con velas. En el centro de la habitación se encontraba una vasija grande de barro en forma ovalada, la cual simbolizaba el huevo cósmico del universo. La vasija se llenaba con agua y se colocaba en ella un banquillo en el cual estaba grabado en plata el símbolo Antahkarana. Una pared de la habitación estaba cubierta de cobre pulido, el cual parecía espejo, y en la pared opuesta se colgaban tapices que mostraban los símbolos de sanación Reiki . Entonces un meditador Lama Tibetano se sentaba en el banquillo y veía fijamente las imágenes de los símbolos Reiki reflejadas en el espejo de cobre pulido. Esta meditación unía así el conocimiento interior del meditador con las energías trascendentales de los símbolos Reiki, en tanto el Antahkarana en el banquillo enfocaba las energías generadas y las hacía que fluyeran por todos los chakras y hacia la tierra. Los Tibetanos no son los creadores del símbolo, y no se cuenta con ninguna escritura acerca de su verdadero origen. Sin embargo, por percepción clarividente, Michelle Griffith ha logrado leer la historia psíquica del Antahkarana. De acuerdo a Michelle, el símbolo fue entregado a los pobladores de la tierra durante los tiempos Lemurianos hace mas de 100,000 años, al mismo tiempo que el Reiki fue traído al mundo por el Espíritu Santo. negativos.
El Antahkarana es un símbolo especial que tiene su propio sentimiento interior. Trabaja directamente con tu aura y tus chakras, y su efecto sanador varía dependiendo de las necesidades de cada persona. Los símbolos pueden ponerse debajo de una mesa de masajes o de una silla, en la pared o sobre alguna zona del cuerpo que requiera sanación. Meditación Puedes meditar directamente en el Antahkarana poniendo tu vista fija y relajada en el símbolo. Con la práctica, la imagen puede moverse o cambiar de forma, desaparecer y aparecer paulatinamente o incluso desaparecer totalmente. Esto es bueno ya que indica que se ha entrado a un nivel mas profundo de meditación. De acuerdo a nuestros Ángeles, el Antahkarana es una puerta hacia otras dimensiones, y se obtienen grandes beneficios con tan solo 10 minutos diarios de meditación.

No hay comentarios: